Hubo una vez una gran sequía. Un cuervo sediento vio, de pronto, una arra, pero supic alcanzaba el agua.
-No puede ser! Moriré de sed si no encuentro la forma de beber.
El cuervo metió aún más el pico y zarandeó la jarra, pero nada... Entonces metió la pat
la idea de mojarla y poder lamer alguna gota, pero su pata también era demasiado
A punto estaba de tirar la toalla cuando tuvo una idea. Durante una hora estuvo el
metiendo piedras en aquella jarra. Era un trabajo lento y pesado, pero al final ob
recompensa. Gracias a las piedras, el agua subió hasta el borde de la jarra y el cuen
saciar su sed.
Moraleja: La necesidad agudiza elingenio. Esta es otra de las más famosas y mejore
e Esopo. Enseña a tener paciencia ante los problemas, pues ante las dificultades s
ejores ideas.​